¿Te llama la atención el tema de las inversiones? ¿Te gustaría comenzar a invertir por tu cuenta? Antes de querer meter tu dinero en la primera oportunidad de inversión que se te aparezca, es importante aprender unos conceptos básicos que te pueden ayudar a evaluar tus alternativas de inversión. Así que el día de hoy hablaremos de dos términos muy importantes en finanzas: rendimiento y riesgo.
¿Qué significa rendimiento?
Desde el punto de vista financiero, el rendimiento es básicamente la ganancia que obtienes de una inversión u operación que realices. Por lo general, es una medida que se expresa en términos porcentuales.
Podemos obtener rendimiento de múltiples operaciones, por lo que no se vincula únicamente a la compra y venta de acciones, o la adquisición de bonos. Por ejemplo, si tú inviertes tu dinero en el negocio de algún familiar o amigo, y éste te regresa tu capital inicial más una ganancia procedente del negocio… entonces habrás tenido un rendimiento positivo. La fórmula para calcular el rendimiento se expresa de la siguiente manera:
Rendimiento= Ganancia ó Pérdida / Inversión Inicial
Volviendo al ejemplo anterior, digamos que tu hermana te pidió $10,000 pesos para iniciar su negocio. Un año después, te regresa los $10,000 pesos y además te paga otros $2,000 pesos extra por haberla ayudado en un inicio. Así que ahora tienes un total de $12,000 pesos. La ganancia de tu inversión es de un 20%, como se muestra a continuación:
Rendimiento= Ganancia / Inversión Inicial = $2,000 / $10,000 = 20%
Los rendimientos también pueden ser negativos. Si por el contrario, tras pasar un año, tu hermana no genera suficientes ingresos en el negocio, decide cerrar… y sólo te regresa $9,000 pesos, quiere decir que tuviste una pérdida de $1,000. Tu rendimiento en este caso sería de 10% negativo:
Rendimiento= Pérdida / Inversión Inicial = ($1,000) / $10,000 = -10%
¿Cuál es la relación de riesgo y rendimiento?
Así como vimos en el ejemplo anterior, cualquier inversión que hagas lleva un riesgo. Es decir, existe una probabilidad de que tengas una pérdida en vez de una ganancia. Riesgo en el contexto financiero se refiere a la posibilidad de que ocurra un efecto adverso que tenga un impacto negativo en tu situación financiera.
La teoría financiera establece que cuanto mayor sea el riesgo de una inversión, el rendimiento también debería ser mayor para que los inversionistas la consideren una propuesta atractiva. Por ejemplo, si los CETES, que son los instrumentos de deuda más seguros que existen en México, tienen una tasa de rendimiento del 5%… entonces una inversión en deuda corporativa de una empresa debería ofrecer un rendimiento mayor a esta cantidad. Por ejemplo Coca Cola Femsa lanzó en febrero de 2020 una emisión de deuda con una tasa fija del 7.75%.
Cuando hablamos de invertir acciones, cuyas fluctuaciones en los precios pueden provocarte pérdidas diarias, la tasa de rendimiento debería ser aún mayor. Esto sucede porque, a diferencia de los CETES o deuda corporativa, las acciones no tienes una tasa fija… al contrario, tu ganancia puede ser ilimitada. Pero también corres el riesgo de perder parte de tu dinero. Para darte una idea, el rendimiento anual promedio del IPC, que contiene 35 acciones de empresas mexicanas, ha sido del 15.82%. Sin embargo, en diciembre de 2018 el IPC tuvo una pérdida total del 15.63% anual. Esta pérdida se contrapone con otros años de mayores rendimientos… y en el largo plazo, se cumple el principio de “a mayor riesgo, mayor rendimiento”.
Entonces… ¿cómo debería elegir mis inversiones?
Por regla general, yo recomendaría primero observar el rendimiento esperado de tu inversión y compararla con otras alternativas para evaluar si el riesgo está a la par con la ganancia que ofrece. Es decir, si un amigo te pide dinero para iniciar un negocio y te ofrece una tasa del 3% anual… lo mejor será rechazarla, pues bien podrías invertir en CETES que es un instrumento prácticamente libre de riesgo.
Si la inversión que planeas realizar cumple con el principio “a mayor riesgo, mayor rendimiento” lo siguiente que deberías considerar es tu tolerancia al riesgo… pues es posible que no estés dispuesto a perder ese dinero en caso de condiciones adversas. Imagínate que tienes un fondo de emergencia y te gustaría invertirlo; sería una mala idea comprar acciones dado que su nivel de riesgo es significativo. Muy probablemente preferirías tenerlo en inversiones seguras, a tasa fija y con disponibilidad diaria.
Recuerda que cada uno de nosotros tiene sus propias metas, aspiraciones y nivel de tolerancia al riesgo… por lo que una buena inversión para alguien no necesariamente significa que también lo será para tu caso particular. Evalúa bien tus alternativas, y en caso de que aún tengas preguntas, lo mejor siempre será acudir a un experto que te ayude a construir tu portafolio de inversión.
Consulta con nuestros expertos
¡En El Peso del Dinero te podemos apoyar con tus dudas financieras! Este es sólo uno de los consejos, pero si te gustaría una asesoría personalizada, no olvides comunicarte con nosotros contáctanos vía redes sociales (Facebook, Instagram, correo [email protected] o en nuestro WhatsApp Oficial https://bit.ly/2EbZRUg
Si te gusto este artículo, y estás preocupado por la seguridad de tus finanzas te podemos recomendar leer también ¿Cómo se calcula el pago mínimo de mi tarjeta?
¡Mucho éxito!