Nadie está exento de pasar por situaciones inesperadas. La vida está llena de cosas fuera de nuestro control y tenemos que asumir las consecuencias de dichos escenarios: podemos perder el empleo, tener un accidente o chocar el automóvil. Lo único que podemos hacer en estos casos es tener un fondo de emergencias para sobrellevar la situación.
Si aún no tienes tu fondo de emergencias, es momento de empezar a construirlo. Por lo tanto, a continuación te explico cómo puedes crear tu propio fondo en cuatro pasos.
Establece el monto de tu fondo de emergencias
Primero que nada, si queremos tener tranquilidad en caso de algún inconveniente, debemos estar preparados con suficiente dinero para cualquier escenario. Para ello, debemos calcular cuánto dinero necesitaríamos en caso de emergencia.
En mi opinión, yo me prepararía inicialmente ante una posible pérdida de empleo o de ingresos. Si esto sucede, debes ser capaz de subsistir por un tiempo en lo que consigues un nuevo trabajo. En esta situación, se recomienda ahorrar el equivalente de tres a seis meses de tus gastos fijos.
¿Qué son tus gastos fijos? Son todos aquellos desembolsos que haces recurrentemente para vivir. Por ejemplo, el pago de renta, servicios, despensa y los pagos de tus deudas. Si perdemos nuestra fuente de ingresos de manera inesperada, al menos tendremos la certeza que no necesitaremos endeudarnos para sobrevivir.
Perder nuestro empleo no es la única fuente de incertidumbre financiera. Otra de las posibles emergencias que podríamos enfrentar es algún accidente o enfermedad. Por lo tanto, el siguiente paso para mí sería el adquirir seguros médicos y de automóvil —si es que tienes uno— y ahorrar los deducibles correspondientes. Así, en caso de alguna situación relacionada a la salud, podremos cubrir el siniestro.
Por último, también consideraría algunas situaciones menos graves como reparaciones de electrodomésticos en el hogar o si se poncha la llanta de tu coche. Esta cantidad puede ser variable, pero es importante tenerla en cuenta.
Ahora que ya calculaste cuánto necesitas ahorrar, es momento de pensar en el siguiente paso.
Decide en dónde lo vas a tener
Un fondo de emergencias debe de estar disponible en cualquier momento en que se necesite. Por lo tanto, no es recomendable meterlo en inversiones riesgosas o poco líquidas. Imagínate si metes tu fondo a un pagaré bancario de seis meses… no podrás hacer uso de ese dinero hasta que haya pasado el plazo. Así que ten cuidado con estas alternativas.
Para que esté disponible de manera inmediata, debes tener tu fondo de emergencias en una cuenta de ahorro o de débito. En el momento en que se requiera, podrás disponer de ese dinero sin ningún inconveniente.
Si cuentas con tarjeta de crédito, yo te recomendaría meter tu dinero a inversiones con liquidez diaria. Por ejemplo, Bonddía en CETES te permite disponer de tu efectivo en 24 horas; algunos bancos también manejan cuentas de inversiones con disponibilidad diaria. Así, en caso de emergencias, podrías pasar tu tarjeta de crédito como medio de pago, y después liquidar ese gasto con tu fondo de emergencias. Realizar este manejo de efectivo permitirá que tu fondo de emergencias crezca más rápido, pues estará generando intereses diarios.
Comienza a ahorrar
Teniendo en claro el monto a ahorrar y la cuenta en donde depositarás tu fondo, el siguiente paso es armar un presupuesto en el que contemples el ahorro mensual de tu fondo de emergencias.
Para ello, es sumamente importante comenzar por evaluar tu nivel de gastos; quizá en este momento no estés ahorrando por estar gastando de más en otros rubros de tus finanzas. En estos casos, es necesario recortar tus gastos no indispensables y canalizar ese excedente a tu fondo de ahorro. Sólo así podrás ahorrar lo suficiente.
Un consejo realmente útil para mejorar la disciplina del ahorro es automatizar transferencias cada quincena —o cada mes, dependiendo de la frecuencia en que recibes tus ingresos— y dirigir un porcentaje de tu salario o ingreso al fondo de emergencias. Tu seguridad es primordial, así que es ampliamente recomendable priorizar el fondo de emergencias sobre otros gastos.
Ten en mente el significado de una emergencia
Como mencionamos anteriormente, las emergencias deben cubrir situaciones en donde dejemos de recibir ingreso, así como accidentes, enfermedades y reparaciones inesperadas de artículos indispensables para la vida diaria. Hacer un viaje por placer, comprar un artículo de lujo o ir a un restaurante no es una emergencia, así que evita utilizar el fondo para estas cosas.
Algunas personas incluso consideran que, si sabes por anticipado que eventualmente tendrás que reemplazar las llantas de tu coche o algún electrodoméstico en casa, esto no debería considerarse una emergencia. Más bien, deberías incluirlo en tu presupuesto anual o mensual para enfrentar el gasto.
Una vez que pase la emergencia y te recuperes económicamente de la misma, es importante restablecer el ahorro de tu fondo a sus niveles originales. Así estarás preparado para enfrentar otra situación en el futuro.
Entonces… ¿estás listo para empezar a ahorrar? Recuerda que siempre puedes contactarnos para ayudarte a crear tu fondo de emergencias. Estamos disponibles para lo que necesites.
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