¿Has escuchado el término “remate bancario”?
Un remate bancario es un proceso legal en el que una propiedad es vendida por una institución financiera debido a que su propietario original no cumplió con los pagos correspondientes a un crédito hipotecario.
Los remates bancarios suelen ser atractivos para las personas que buscan adquirir propiedades a buen precio. Sin embargo, para obtener dicho descuento, se requiere pasar por juicios y otros trámites que pueden extenderse por varios años.
Entonces… ¿realmente vale la pena adquirir un inmueble a través de un remate bancario? Sigue leyendo a continuación para descubrirlo:
¿Cómo puedo comprar un inmueble a través de un remate bancario?
En primer lugar, es importante distinguir que cuando “compras” un remate bancario, realmente NO estás adquiriendo un inmueble. En su lugar, estás adquiriendo los derechos relacionados al proceso legal de la recuperación del activo.
Existen dos tipos de derechos que puedes adquirir a través de un remate bancario:
- Cesión de derechos litigiosos: En este caso se adquieren los derechos de la demanda que el banco presentó contra el cliente que no pagó su crédito hipotecario. Esto significa que tomas la responsabilidad del banco de terminar el proceso judicial de la adjudicación de la propiedad. Al ganar el juicio es cuando puedes iniciar con la escrituración y posesión del inmueble.
- Cesión de derechos adjudicatorios: En este escenario el banco ya ganó el juicio y el bien inmueble pasa a venderse. El precio de estos derechos es más elevado que el anterior porque el banco busca recuperar los costos del litigio.
En una cesión de derechos litigiosos, el banco suele pedir hasta un 30% del valor comercial del inmueble que debe pagarse de contado. Por otra parte, en una cesión de derechos adjudicatorios este precio aumenta, sin embargo, aún puedes encontrar inmuebles hasta un 40% por debajo de su valor de mercado.
Ventajas de un remate bancario
La principal ventaja de adquirir un remate bancario es el gran ahorro que podrás obtener en la compra del inmueble. Es decir, una propiedad que originalmente costaba tres millones de pesos podría adquirirse en un rango de precio entre uno y dos millones de pesos, dependiendo de si cuentas con los derechos litigiosos o adjudicatorios.
Al adquirir un inmueble por debajo de su valor comercial, el rendimiento o ganancia que puedes obtener por la compraventa del inmueble también se multiplica. Es decir, si al final del proceso tu inmueble con valor original de 3 millones ganó una plusvalía de 800 mil pesos, y tu precio de adquisición fue de un millón de pesos, entonces tu ganancia neta sería de 2.8 millones de pesos.
Desventajas de un remate bancario
Desafortunadamente, no todo es color de rosa. Si bien un remate bancario puede ser una excelente oportunidad de adquirir propiedades a bajo costo, también puede darte muchos dolores de cabeza.
La primera desventaja al adquirir un remate bancario es que no puedes visitar el inmueble antes de comprarlo. En ocasiones, algunas de estas propiedades cuentan incluso con personas viviendo en ella. Por lo tanto, es difícil saber de antemano el estado del inmueble antes de ganar el juicio.
Otra desventaja de los remates bancarios es el tiempo que toma el proceso legal. De acuerdo con la CONDUSEF, cuando el inmueble se adquiere bajo el proceso de demanda —es decir, que adquiriste los derechos litigiosos— el proceso puede durar hasta dos años. En una cesión de derechos adjudicatorios, el inmueble puede recuperarse en un periodo promedio entre tres y seis meses.
También es importante considerar que la mayoría de los gastos extra correrán por tu cuenta. Es decir, cualquier gasto del proceso judicial, escrituración, avalúos, honorarios y arreglo de desperfectos —e incluso pagos atrasados de agua, luz y predial— deberán provenir de tu bolsillo. Esto, por supuesto, reduce el margen de ganancia que puedes obtener por el inmueble en caso de revenderlo.
En general, no es recomendable adquirir un remate bancario si no se cuentan con unas finanzas sanas, liquidez, y la suficiente paciencia para continuar con el proceso. En casos muy extremos, siempre existe la posibilidad de perder el juicio… lo que resultaría en una pérdida para tu patrimonio.
Y entonces… ¿invertirías en remates bancarios?
Si te gusto esta entrada, puedes leer Remates Bancarios: ¿Valen la pena para adquirir un inmueble?
Consulta con nuestros expertos
¡En El Peso del Dinero te podemos apoyar con dudas financieras! Este es sólo uno de los consejos, pero si te gustaría una asesoría personalizada, no olvides comunicarte con nosotros contáctanos vía redes sociales como Facebook, Instagram, correo [email protected] o en nuestro WhatsApp Oficial https://bit.ly/2EbZRUg